La indagación nos lleva forzosamente a eliminar los pensamientos en una ardua tarea. Son recurrentes pues vienen en oleadas seguidas y persistentes, ya que, se resisten a ser abandonado. Los Maestros nos ayudan con fórmulas ya contrastadas pero que se deben adecuar a la personalidad de cada uno en función de nuestra vibración personal.
Él..., el Maestro es nuestro ancla que nos fija la posición en la que debemos estar,
Él conecta con esa vibración.
Él es el Maestro.
Él..., el Maestro es nuestro ancla que nos fija la posición en la que debemos estar,
Él conecta con esa vibración.
Él es el Maestro.